Dulce Venganza: Cap 5

PERDÓN, PERDÓN, PERDÓN!! Mil disculpas la demora, para hacerla corta, no tuve tiempo en todos estos días. Estuve de un lado para otro.

-Juan Pedro pidió vivir en esta mansión y creo que está en todo su derecho de hacerlo-

-Nicolás, ¿te estás escuchando? Estás trayendo a vivir a alguien que ni siquiera conocemos, y no tiene ningún derecho a nada- Lali se sentía desesperada, Juan Pedro estaba recién entrando a su vida y ya estaba poniendo su mundo de cabeza

-De acuerdo al testamento tanto él como tú son los dueños de esta mansión, pero también de acuerdo al testamento, él y yo somos los dueños. Al menos hasta que cumplas 21 años yo seré el dueño-

-Ese testamento es una mierda, si pudiera traer a mi abuelo de la otra vida lo haría para volverlo a matar- Lali volteó a ver a Peter- ¡Y tú te vas ahora mismo!-

-Y si no quiero, ¿qué?- la provocó con una sonrisa arrogante, que si no estuviera tan enojada le hubiera robado el aliento

-¡ARTURO!- gritó Lali, y en seguida apareció un hombre alto y fornido vestido con un traje

-Señorita Espósito, ¿qué desea?- preguntó Arturo

-Llévate lejos a este hombre-

Arturo agarró con mucha fuerza del brazo a Peter y lo arrastró hasta la puerta principal

-Arturo detente- ordenó Nicolás- Peter ahora en adelante es uno de los señores de esta mansión, así que le debes respeto-

-Recapacita Nicolás, estás cometiendo un grave error al dejar que este hombre viva con nosotros-

-No voy a discutir esto contigo Mariana-

-¡TODO ESTO ES MÍO! Simplemente porque llegaste a ocupar el lugar de mi abuelo no estás en el derecho de creerte el dueño de mi vida y menos de todo lo que te rodea. Pero disfrútalo mientras puedas porque te juro que apenas pueda hacerme cargo de mi herencia te dejare en la calle y no te tendré compasión- amenazó Lali a su tío y después subió las escaleras corriendo

-¿Siempre es así?- preguntó Peter riéndose mientras miraba por dónde se había ido Mariana hace unos segundos

-Toda la vida fue así- se lamentó Nicolás- Y ahora tiene 20 años, para mí es imposible que logré cambiar y me temo que para hacerlo va a tener que sufrir mucho. Hago lo que puedo pero Salvador fue extremadamente condescendiente con Lali-

-Se nota que te preocupa mucho que ella sea así-

-No es bueno que siempre te den todo lo quieres, Salvador cometió un grave error al criarla-

-¿Me permitiría ir a la habitación de Mariana para hablar con ella?- preguntó Peter, rogando internamente que Nicolás accediera

-Adelante, segundo piso a la derecha encontrarás un pasadizo, la última puerta a la izquierda-

Peter camino apurado dirigiéndose por las indicaciones de Nicolás, no fue tan difícil encontrar dicho pasadizo, el cual era muy espacioso.

-Mariana, necesito hablar contigo- dijo apenas estuvo parado al frente de la puerta de su habitación

Nadie respondió y después de un par de minutos tocó la puerta

-¿Qué quieres?- preguntó Lali irritada abriendo la puerta de golpe

-Hablar contigo-

-Pues yo no quiero-

Lali intentó cerrar la puerta en la cara de Peter pero él fue más rápido e impidió con su mano que cerrara la puerta

-Sólo quiero saber porqué me odias tanto- dijo Peter entrando a la habitación y cerrando la puerta

-¿Quieres que no te odie?- preguntó Lali y al él asentir, prosiguió- Pues, puedes comenzar con irte de esta casa y terminar matándote, si es posible. Ahora, yo no entiendo cómo hiciste para que Nicolás creyera en todo lo que dices-

-Soy alguien de fiar-

-Pues yo lo dudo- dijo Lali acercándose más a él

-Puedo hacerte cambiar de opinión-

-No te creo-

-¿Quieres que te lo demuestre?- preguntó Peter desafiante y acercando más su rostro al de Lali

-¿Podrás? Lo veo casi imposible- dijo Lali provocándolo

-Lo único imposible es que no haga lo que estoy a punto de hacer-

-¿Hacerme cambiar de opinión? Pues, adelante-

-Tú lo quisiste-