Dulce Venganza: Cap 97

Holaaaa, que tengan un buen inicio de semana, les dejó aquí otro cap, copense con las firmas chicas! Lo de la maratón es buena idea, el viernes lunes o martes? Creo que esos 3 días no tendré clases entonces me lo facilita muchísimo, besos.

-¡Peter!- lo regañó Nico fulminándolo con la mirada

-Sólo será un segundo- se intentó excusar éste

-Los segundos hacen la diferencia-

Peter se pasó la mano por su cabellera despeinada, odiaba cuando Nico se ponía así de insoportable, soltó un bufido.

-Sé coherente Nicolás, están llamándome al móvil y tengo que contestar, puede ser Lali, incluso Euge, y no creo que estén llamando sólo para pasar el rato, tal ves tengan información para nosotros-

-No creo que...-

-No jodas Nico, digas lo que digas no pienso ignorar un llamado que se trate de Lali o su amiga, y tu ex prometida, Euge- soltó Peter dándole la espalda y alcanzando su celular que se encontraba en el bolsillo de su saco colgado en uno de los sofá.

El número era desconocido, Peter frunció el ceño, dadas las circunstancias si era un número desconocido probablemente fuera el captor de Alai, que en este caso sería captora, María Del Cerro.

-¿Quién al habla?- preguntó Peter atendiendo al instante, sabía que debía de comunicarle a la policía que le había llamado un número desconocido, pero lo importante por ahora era contestar.

-Mi amor-

Peter frunció el ceño aún más, si eso era posible, al entender el significado de las palabras pensó que era Lali, aunque lamentablemente ella nunca le había dicho así anteriormente, pero al reconocer la voz...

-¿No te quedó en claro que no quiero hablar más contigo, Giannina? Y que sea la última vez que me llamas de eso modo-

-Peter si tan sólo...-

-Adiós, Nina- dijo Peter antes de cortar, despedirse fue una cortesía, la hubiera mandado al diablo si no tuviera otras cosas mejores de qué ocuparse.

Tendría que decirle a Lali que Nina había conseguido su número de celular, dudaba que le gustara mucho la noticia.

-¿Y quién era?- preguntó Nico cuando volvió a su lado

-Nina- murmuró Peter con desprecio, y decidido a cambiar de tema, preguntó- ¿Qué tanto ha descubierto la policía hasta ahora?-

-Creo que María viajó en el mismo avión que Euge y yo cuando retornamos para acá, creen que ya nos estaba siguiendo desde antes de eso, puede que haya un cómplice, ¿cómo sino sabría el momento exacto para llevarse a Alai? Un pequeño descuido de la enfermera y Alai desapareció, lo tenían todo bien planeado-

-Nada de esto hubiera pasado si no te hubiera dejando a tu hija al cuidado de otra persona, lo siento, pero es la verdad- dijo Peter sabedor que estaba siendo duro con su amigo

Nico no dijo nada y Peter lamentó haber metido mucho la pata.

-Sé que soy un mal padre, Peter, me lo merezco, pero Alai no, me merezco estar pasando por esto, pero sólo yo, ¿por qué ella? ¿Eh, Peter? ¿Qué hago si le pasa algo parecido a lo de Diana? Tú eres fuerte, tú pudiste con ello, yo no podré, si le pasa algo a Alai yo me muero- susurró Nico estrepitosamente

-No soy fuerte, tampoco he podido con ello- confesó Peter aclarándose la garganta, ambos estaban charlando mientras veían cómo los policías se movilizaban de un lado para otro por la casa, hablando entre ellos, sumergidos en su trabajo- Cuando murió Diana, y cuando creía que había muerto también Nina, yo me fui a una isla, ¿lo recuerdas?-

-Algo así, no hablaste nunca de ello- recordó Nico en un susurro tan bajo que parecía casi como si no hubiera dicho nada

Peter soltó una carcajada carente de alegría, más bien todo lo opuesto.

-Recuerdo que me emborrachaba día y noche, era una maquina sexual que no descansaba nunca, me perdí a mí mismo- contó con una sonrisa en los labios, pero también sin nada de alegría- O en realidad me perdí a mi mismo mucho antes, el día que murió Diana me perdí, pero Lali me salvó, ella es como un ángel, más precisamente mi ángel-

-¿Te has enamorado de ella?- preguntó Nico levemente sorprendido

-¿Y quién no lo haría tendiéndola a ella como esposa?- respondió Peter con una sonrisa y luego palmeó la espalda de su amigo- Encontraremos a Alai, aunque me vaya la vida en ello, la recuperaremos, sabes que lo que prometo cumplo, ¿cierto?-

-Estoy hablando con el hombre que me ayudó a llevar a la bancarrota a las fusión más poderosa que ha habido en los últimos tiempos sólo para cubrir los constantes gastos de Alai, y asegurar su calidad de vida, ¿de qué me hablas? ¡Por supuesto que lo sé!-

-¡La tenemos!- gritó uno de los policías acercándose a ambos hombres atropelladamente- ¡La encontramos, señor Riera!-

-¿Qué? ¿Dónde está?-

-Su esposa acaba de mandar un mensaje dándonos las coordenadas- informó el policía mirando a Peter directamente

Nico fue corriendo junto con el policía para que le mostrara dichas coordenadas, pero Peter no, se quedó paralizado dónde estaba, era como si le hubieran clavado los pies ahí, ya ni siquiera pensaba en Alai.

Peter apretó ambos puños y rechinó los dientes.

Si había sucedido lo que estaba sospechando, y apostaba que así era, Lali se podría dar por muerta ahora mismo.