Dulce Venganza: Cap 74

Holaaaaaa!! Cómo van? Les dejo capitulo, no se olviden de firmar :) Anónimo: No, este es el único blog :)

 

-¿Nina?- volvió a preguntar Lali rogando haber escuchado mal, aunque eso era muy improbable

-Si te lo digo es porque no quiero que te enteres por terceras personas- explicó Peter sin dejarla de mirar, como si fuera una animal salvaje que en cualquier momento podría atacarlo.

El aturdimiento no le permitió ofenderse por la forma en que la miraba Peter.

-Dices que Nicolás mandó a esos hombres, ¿qué quiere saber Nicolás sobre Nina?-

-Por lo que me dijeron quiere que les cuente cómo era mi relación con Nina-

-¿Y lo harás?-

-Si fuera por mí, jamás. Pero sabes perfectamente que tu tío me puede obligar en cualquier momento- respondió Peter encogiéndose de hombros y apartando, por fin, su mirada de ella- Por ahora lo hace de una manera disimulada, pero prefiero darle lo que quiere antes de empeorar las cosas-

-¿Por qué  le interesa tano a mi tío saber cómo fue tu anterior matrimonio? - al terminar de formular aquella pregunta, Lali pudo ver cómo se le cambiaba la expresión a Peter

-No creo que quieras saberlo- murmuró Peter posando su mano en la mejilla de Lali y acariciándola

-Pruébame- pidió Lali cerrando los ojos, sentir el contacto de Peter le proporcionaba un sentimiento de seguridad

-¿Qué piensas de lo que te acabo de contar?-

-Que prefiriría que antes de contarle a desconocidos sobre tu relación con Nina, me la contaras a mí, siempre te niegas a hacerlo-

-Tal vez tenga mis razones-

-Ya sé cuáles son, y déjame decirte que son tonterías-

-Esperar a que nuestra relación madure no me parecen tonterías-

-Pues a mí sí- dijo Lali abriendo los ojos y poniendo su mano sobre la de Peter, acariciando su dorso con uno de sus dedos- ¿Cómo era Nina?-

Peter no respondió, se limitó a mirarla con ojos suplicantes.

-Por favor- insistió Lali llevándose la mano de Peter a los labios dándole besos en la palma de la mano

Peter hizo una mueca y comenzó a hablar.

-Muy dócil, tierna, amaba con locura el mar, a veces creía que mucho más que a mí o a nuestra hija, pero sé que eso es una locura, nosotros éramos todo para Nina. Le encantaba cumplir los caprichos de Diana y era imposible enojarse con ella, la veías y te dabas cuenta que era el ser más bueno que existía en este mundo. Muchas veces llegué a pensar que no me merecía a Nina, ella era demasiado buena para mí- respondió Peter hablando lo más rápido que le fue posible- En ciertas cosas muy diferente a ti, pero no me quejo de cómo eres, me encanta tu forma de ser, Lali-

-¿En ciertas cosas? Yo diría que en todo- contradijo Lali con una media sonrisa- Jamás podría ser dócil, no me gusta tanto el mar y sé muy bien que soy capaz de hacerte morir de enojo, tampoco soy el ser más bueno, ni mucho menos-

-Podrías no ser la chica más buena del mundo, ¿pero sabes algo?- susurró Peter sonriendo- Para mí eres como un ángel, mi ángel personal, para ser más exactos-

Lali arqueó una ceja intentando con nada de éxito reprimir una carcajada

-¿Qué te ríes? Hablo en serio- reclamó Peter sonriendo de oreja a oreja

Lali negó con la cabeza sin dejar de sonreír y besó a Peter, era tan dulce ese hombre...


-Es un completo irresponsable, ¿te das cuenta, Rocío?- preguntó Euge alterada, buscando otra almohada para tirarla contra la pared

-¿Rocío? ¡Huy! Eso no me gusta nada- comentó Rochi viendo a través de la pantalla de su ordenador portátil cómo Euge, toda despeinada y con la pijama aún puesta, tiraba otra almohada contra la pared

-Tiene una niña, que disculpa la expresión, tiene las horas contadas. ¿Y qué hace Romeo?...-

-Se llama Nico, no Romeo- interrumpió Rochi, corrigiéndola

-¡Riera en un debút de Romeo trucho! Viene hasta acá, tan lejos, sólo para darse el gusto de joderme más-

-Tal vez quiere arreglar las cosas-

-¿Arreglar las cosas? ¿Es enserio, Rocío?- preguntó Euge dirigiéndose hacia su ordenador y mirando directamente a la cámara web- Él lo único que quiere es darse el lujo de hacerme enojar, ni siquiera le importa que su hija se esté muriendo. Ni siquiera eso lo detiene para venir a mi encuentro-

-¿Será que te sigue amando?-

-¿Será que es un idiota y nunca más cambiará? Ya lo creo que yo tengo la razón-

-¿Y si le das la opotunidad de que te explique cómo sucedieron verdaderamente las cosas?- sugirió Rochi

-¿Y si mejor le tiro una patada dónde más le duele?